Sabemos lo que hay detrás de cada gorra.
No fue solo una compra. Fue tiempo, esfuerzo, un lujo, algo que te costó.
Y eso… merece ser cuidado.
Porque no es solo “guardar tu gorra”.
Es darle el lugar que se ganó.
Crown Box 2.0 no es para cualquiera.
Es para el que no quiere conformarse.
Es para el que sabe lo que vale.